Aislamiento

Desde que llego a Copiapo, he estado encerrado, sin siquiera poder estar solo del todo. Es como esa forma de tortura en la que no te dejan dormir echandote agua justo cuando te estas quedando dormido.
Pero se tiene mucho tiempo para pensar.
Pensar en la vida, en la gente, en las cosas que ocurren, en la existencia, en demasiadas cosas.
Lo siento, intento parecer interesante y en lo posible misterioso y enigmatico, pero no resulta.
Malditas decisiones, componen la vida y aun asi son irritantes. Hay que perder, hay que ganar, hay que hacer ambas cosas al mismo tiempo. y todo en el desconcierto.
Las canciones que oigo no ayudan tampoco.
Nose que mierda quiero.
Y a quien le importa, es una pequeña vida, insignificante como todas las demás. A quien le importa lo que piense un punto en el espacio, lo que sienta un punto en el espacio, lo que tema.
Si pudiera escribir de alguna manera la voragine de pensamientos y sentimientos que transcurren uno tras otro mas rapido de lo que alcanzo a experimentarlos, quizas entenderia algo.
Mirarse en un espejo roto es similar a la sensacion. Estar sentado en un lugar lleno de gente moviendose tambien se parece. Estar al interior de una disco con un vaso en la mano, pensando en cualquier otra cosa tambien es similar.
Deseo dejar de pensar, pero no tengo donde descansar en el intertanto. No puedo dormir, no puedo sentarme, estoy obligado a estar encerrado en mi cabeza.

martes, 29 de diciembre de 2009